Otros Padres Antenicenos
Otros Padres Antenicenos, no mencionados aquí, también creían en la Trinidad. Por ejemplo, el décimo capítulo de la obra de Atenagoras "Ruego por los cristianos", escrito al rededor de 175 E.C., se titula "los Cristianos adoran al Padre, Hijo, y Espíritu Santo".
Dionisio, obispo de Roma entre 259-268, afirmó lo siguiente: "Porque el Verbo Divino debe de necesidad estar unido al Dios del Universo, y el Espíritu Santo debe tener su morada y habitación en Dios; así es una necesidad absoluta que el Trío Divino sea resumido y reunido en una unidad, llevándose para así decirlo a una cumbre, y por esta Unidad quiero decir todo el soberano Dios del Universo [...] Por que si llegó a ser un Hijo, había [un tiempo] cuando no era; pero él era siempre, si, es decir, está en el Padre, como él mismo dice, y si el Cristo es Verbo y Sabiduría y Poder, como, ya sabes, las Escrituras Divinas dicen que es, y si estos son atributos de Dios. Porque si el Hijo llegó a ser había [un tiempo] cuando estos atributos no eran; por lo tanto había un tiempo cuando Dios estaba sin ellos; lo que es muy absurdo." (Ap. Athanasius, De decr.26)