Revelación 3.14

Al denominar a Jesús el "principio de la creación de Dios", Juan emplea la palabra griega "a)rxh&" - arjé. En sus escritos esta palabra no se usa para "primero" en una serie de cosas (cuyo uso se encuentra una única vez en 2.11), sino "primero" en el tiempo (ver Jn.1.1,2; 6.64; 8.25,44; 15.27; 16.4; 1Jn.1.1; 2.7,13,14,24; 3.8,11; 2Jn.5,6). Esta relación con el tiempo se ve perfectamente en 2Ped.3.4, donde se usa la misma frase, tanto en castellano como en griego. Aquí nos dice que "todas las cosas continúan como desde el principio de la creación". Está claro que habla de un punto en el tiempo.

Cuando esta palabra "arjé" se ve aplicada a las personas o seres espirituales, encontramos que nunca tiene este sentido, sino más bien uno de "gobierno" o "primera autoridad". En el libro de Revelación (1.8; 21.6; 22.13), se usa para Dios como "principio y fin", ¡lo que no denota que tuviera Jehová un comienzo! Tiene el mismo sentido al hablar de Cristo como "principio" en Col.1.18. En Rom.8.38 se traduce por "gobiernos", al igual que en 1Cor.15.24; Ef.1.21; 3.10; 6.12; Col.1.16; 2.10; 2.15; Tit.3.1. En Luc.12.11 se traduce por "funcionarios de gobierno", y en el singular es traducido como "gobierno" en Luc.20.20. Se ve por lo tanto que, cuando es aplicada a las personas, "arjé" tiene el sentido del que gobierna, el "primero" en este sentido. Este texto entonces admite la interpretación de que Cristo es el "primero" sobre la creación, y no el primer ser creado.

Volver al menú inicial de este tema

Pasar a la página siguiente